Títol
Comença amb X.
Lema
Cadena perpètua = Dipòsit del vàter que no tanca bé.
Poema model
13
Martín Antolínez se vuelve a la ciudad
Spidiós el caboso de cuer e de veluntad.
Sueltan las riendas e pienssan de aguijar.
Dixo Martín Antolínez, el Burgalés leal:
“veré a la mugier a todo mio solaz,
”castigar los he commo abrán a far.
”Si el rey me lo quisiere tomar, a mi non m’incal.
”Antes seré convusco que el sol quiera rayar.”
14
El Cid va a Cardeña a despedirse de su familia
Tornavas don Martino a Burgos e mio Çid aguijó
pora San Pero de Cerdeña quanto pudo a espolón,
con estos cavalleros quel sirven a so sabor.
Apriessa cantan los gallos e quieren crebar albores,
quando llegó a San Pero el buen Campeador;
el abbat don Sancho, cristiano del Criador;
rezaba los matines abuelta de los albores.
Y estava doña Ximena con çinco dueñas de pro,
rogando a San Pero e al Criador:
“Tú que a todos guías, val a mio Çid el Campeador.”
15
Los monjes de Cardeña reciben al Cid.—Jimena y sus hijas llegan ante el desterrado
Llamavan a la puerta, i sopieron el mandado;
Dios, qué alegre fo el abbat don Sancho!
Con lumbres e con candelas al corral dieron salto,
on tan grant gozo reçiben al que en buen ora nasco.
“Gradéscolo a Dios, mio Çid”, dixo el abbat don Sancho;
“pues que aquí vos veo, prendet de mí ospedado.”
Dixo el Çid, el que en buen ora nasco:
“graçias don abbat, e so vuestro pagado;
”yo adobaré conducho pora mí e pora mios vasallos:
”mas por que me vo de tierra, dovos çinquaenta marcos,
”si yo algún día visquiero, seervos han doblados.
”Non quiero far en el monesterio un dinero de daño;
”evades aquí pora doña Ximena dovos çient marcos;
”a ella e a sus fijas e a sus dueñas sirvádeslas est año.
”Dues fijas dexo niñas e prendetlas en los braços;
”aqui vos las acomiendo a vos, abbat don Sancho;
”dellas e de mi mugier fagades todo recabdo.
”Si essa despenssa vos falleçiere o vos menguare algo,
”bien las abastad, yo assí vos lo mando;
”por un marco que despendades al monesterio daré yo quatro.”
Otorgado gelo avie el abbat de grado.
Afevos doña Ximena con sus fijas do va llegando;
señas dueñas las traen e adúzenlas en los braços.
Ant el Campeador doña Ximena fincó los inojos amos.
Llorava de los ojos, quísol besar las manos:
“Merced, Canpeador, en ora buena fostes nado!
”por malos mestureros de tierra sodes echado.
16
Jimena lamenta el desamparo en que queda la niñez de sus hijas.—El Cid espera llegar a casarlas honradamente
“Merçed, ya Çid, barba tan complida!
”Fem ante vos yo e vuestras ffijas
”iffantes son e de días chicas,
”con aquestas mis dueñas de quien so yo servida.
”Yo lo veo que estades vos en ida
”e nos de vos partir nos hemos en vida.
”Dadnos consejo por amor de santa María!”
Enclinó las manos la barba vellida,
a las sues fijas en braço las prendía,
llególas al coraçón, ca mucho las quería.
Llora de los ojos, tan fuerte mientre sospira:
“Ya doña Ximena, la mi mugier tan complida,
”commo a la mie alma yo tanto vos quería.
”Ya lo veedes que partir nos emos en vida,
”yo iré y vos fincaredes remanida.
”Plega a Dios e a santa María,
”que aun con mis manos case estas mis fijas,
”e quede ventura y algunos días vida,
”e vos, mugier ondrada, de mí seades servida!”
Anònim
Edició consultada:
Cantar primero. Destierro del Cid.
Poema de Mío Cid. Edición, introducción y notas de Ramón Menéndez Pidal.
Madrid, Espasa-Calpe, 1971.